¿Cómo solucionar las uñas frágiles y quebradizas?
Las uñas quebradizas son una alteración muy común. y una de las consultas dermocosméticas más habituales.
Ya que además de la función estética que desempeñan en las manos y pies, unas uñas frágiles pueden interferir negativamente en el ámbito profesional, así como dificultar ciertas actividades cotidianas como lavarse el pelo o vestirse.
Sus causas son:
- Envejecimiento. Tener las uñas frágiles y estriadas es, a menudo, parte del proceso fisiológico del envejecimiento.
- Deficiencias nutricionales. Unos bajos niveles de hierro, calcio, zinc y vitamina b pueden ser también una causa de uñas quebradizas y débiles.
- Deshidratación. Lavar las manos con frecuencia, sobre todo con agua caliente, puede provocar la deshidratación de la piel y las uñas.
- Sustancias químicas. El contacto directo con productos de limpieza fuertes, o ciertos ingredientes presentes en los cosméticos de manicuras como quitaesmaltes con acetona, eliminadores de cutícula con hidróxido sódico y potásico, o con formaldehído.
- Traumatismos. Gestos cotidianos como teclear el ordenador o tocar un instrumento pueden causar microtraumatismos que debiliten la lámina ungueal.
Para poder fortalecer las uñas, tanto de las manos como de los pies, conviene seguir una serie de medidas en el día a día.
- Realizar una manicura adecuada. El esmalte no se debe aplicar y retirar más de una vez por semana. Asimismo, se aconseja utilizar un quitaesmaltes sin acetona. Respecto a las uñas artificiales, cabe tener en cuenta que su retirada implica un traumatismo.
- Usar crema hidratante para manos y uñas.
- Aplicar un endurecedor de uñas.
- Mantener una dieta equilibrada. Una alimentación variada es fundamental para evitar la deficiencia de hierro, el calcio, el zinc, la vitamina D, la biotina y otras vitaminas del grupo B.
- Evitar los agentes irritantes. En la medida de lo posible, hay que impedir el contacto directo con detergentes o productos desinfectantes.